Los
sistemas de identificación por radiofrecuencia o RFID son una nueva tecnología
para la identificación, seguimiento y recuperación de datos mediante el uso de
ondas de radio que puede identificar de los objetos almacenados sin necesidad
de contacto, ni siquiera una visual. Para esto, se requieren tres elementos
básicos: una etiqueta electrónica, un lector de etiquetas y una base de
datos.
La etiqueta o tag RFID, que
consiste en un microchip que cuenta con una antena de radio y puede adherirse a
un producto o material en cualquier momento de su proceso de fabricación o
distribución. También se va a necesitar un lector que sea capaz de leer los
datos almacenados en la misma y una base de datos que permite el reconocimiento
de las etiquetas y la administración del inventario (Spekman, 2005).
La
tecnología RFID funciona en el control de los inventarios de la siguiente
manera:
Se escribe sobre un tag,
mediante un software, la información que le interese a la empresa sobre los
productos que contiene un pallet del almacén. Este proceso se hace para varios
en varios pallets y luego se les pega en los pallets estas etiquetas, y se le
informa al sistema que dentro del almacén están esos productos. Luego, se ubica un portal con las antenas a
la entrada del almacén, y se conecta este sistema a un computador. Cuando entra
un nuevo producto, en cuyo pallet viene etiquetado con RFID, se pasa por el
portal con los lectores que automáticamente se ingresan la entrada de los
productos en el inventario. Cuando sale cualquier producto del almacén, también
debe salir por la puerta con los lectores, y el sistema detecta que ha salido
esta mercancía que la descuenta del inventario (KOK, 2007). Esto demuestra que en todo momento, se conocerán las
existencias en el almacén, y con tantos datos como se deseen, como por ejemplo,
precio, fecha de caducidad, número de lote, etc e incluso se le puede hacer el
seguimiento a estos productos, y conocer, el día, la hora, el tipo, el número
de lote, de la mercancía que se ha enviado al proveedor.
Finalmente,
La tecnología RFID tiene una gran cantidad de aplicaciones y usos. Debido a la
sencillez que presenta su utilización, así como los múltiples campos de
aplicación hacen que esta tecnología tenga gran grado de aplicación en la
administración de los inventarios. Con esta tecnología se puede:
· Identificar
cada objeto con cada etiqueta.
·Conocer
la ubicación específica de cada objeto con cada etiqueta.
·Permite
saber si determinados objetos se encuentra en el almacén no, o si se debe
reponerlo o ha llegado un nuevo pedido.
· Almacenar,
leer, reescribir o agregar información valiosa (Cantidad de lotes, color,
tamaño de inventario, peso, modelo, fecha de creación y cualquier otra
especificación).
·Conocer
el estado del inventario: a qué temperatura se encuentra, nivel de humedad,
vibración, luz, radiación, etc.
En
nuestro país, Familia Sancela S.A.
implementó la tecnología RFID, con lo cual automatizó el control de
inventarios. Al implementar esta tecnología
Familia Sancela S.A., consiguió mejorar en gran medida la trazabilidad del producto terminado a
través de toda la cadena de abastecimiento y además, con este sistema lograron
tener confianza total de la cantidad de producto terminado que entra al centro
de distribución, al tener los inventarios en tiempo real.